Trucos para la productividad ¡los amarás!

Un día me vi llorando en el piso de mi baño. Encerrada y con los oídos tapados para no escuchar más. La maternidad me sobrepasó, el tiempo no me rendía, el cansancio era abrumante y la paciencia limitada.

Esto no solo me afectaba a mí, afectaba a mis hijos y esposo por no ser capaz de canalizar mi energía. Gritaba de más, regañar de más y hacía que para todos en casa, la situación fuera difícil

¿te sientes así? ¡No es tu culpa! Nadie dijo que sería fácil; pero con este artículo te vamos a acompañar.

Lee con atención e inicia un camino a la felicidad con estos trucos para la productividad:

¡Organiza las comidas de tu semana!

Cada domingo me tomo una hora para planear y organizar los menús de la semana. Escribir todo esto te ahorrará el tiempo de pensar cada día qué comer, qué cocinar e incluso de pararte frente la nevera a improvisar.

¡Recuerda! No eres un restaurante y repetir comidas no está mal. Crea menús sencillos, sanos, fáciles de preparar y que puedas anticipar.

¡Báñate al despertar!

Es el truco más fácil y sorprendente de la vida. Muchas personas prefieren hacer el desayuno primero o atender a los niños para después irse a la ducha; pero bañarte primero que todo, te ahorrará mucho tiempo y te recargará de energía. Puedes incluso despertarte media hora antes y darte un baño largo y caliente mientras escuchas una canción que te haga feliz.

¡Desactiva las notificaciones de tus redes sociales!

Esto a mí, me cambió la vida. Hay días en los que queremos ser productivas, hacer mil cosas y nos levantamos con todo el ánimo para eso… pero suena el celular y es tu amiga enviándote un video por Instagram y tú, después de ver el video no fuiste capaz de salirte y comenzaste por minutos o incluso horas a navegar y navegar en tu celular, para luego sentirte mal por haber perdido tanto tiempo.

Para evitar esto, ingresa a los ajustes de tu celular, y elimina las notificaciones de lo que sientas que te roba mucho tiempo. ¡Te encantará!

¡Hazte un horario y apuestale a la productividad!

Y que sea así tal cual como el de los niños, con descansos incluidos. Escribe tu horario por bloques de 2 o 3 horas. Por ejemplo: Un bloque de quehaceres en la casa, otro bloque de leer y responder correos más hacer llamadas, otro bloque de juego con los niños e incluso otro para planear tus próximos proyectos y sueños.

¿Para qué hacerlo por bloques? Porque tenemos la costumbre de hacer todo y no hacer nada. Creemos que podemos contestar correos, lavar la ropa y vernos una serie al mismo tiempo ¡ese el problema de nuestra poca productividad!

¡Ve de más a menos!

Elige como las primeras actividades de tu día, esas que resulten un poco más pesadas, difíciles o que te lleven más tiempo de hacer. Esto es porque al principio de la mañana estarás con más energía, la mente fresca y el cuerpo poderoso. A medida que pasan las horas, tu batería se irá gastando y querrás hacer tareas más mecánicas y con menos esfuerzo que la anterior. Al final del día podrás solo descansar, ver una película, leer un libro o ahí sí ¡mirar tus redes sociales!

¡No necesitas ser súper woman!

No tienes nada que demostrarle a los demás, no tienes que poder con todo. Ve a tu ritmo, pon tus tareas en un lapso de toda la semana y no en un mismo día. La vida también es para disfrutar, salir a comer, ver una serie o charlar; no quieras gastarla toda en lo que tienes que hacer para otros. Delega, pide ayuda y date tiempos de ocio solo para ti. Esto también te recargará y le aportará a tu productividad.