Seguramente has escuchado hablar de la estimulación temprana. Si pronto vas a tener un bebé o si ya lo tienes, debes saber por qué es tan importante y cómo puedes ponerla en práctica.
¿Qué es la estimulación temprana?
Los bebés nacen con un grado de percepción natural que los padres deben ampliar a medida que sus hijos crecen.
La estimulación temprana es una serie de técnicas que se aplican para promover el desarrollo de los niños en diferentes áreas: sociales, emocionales, físicas y cognitivas.
Existe una estimulación que se da por el instinto materno y paterno, especialmente a bebés recién nacidos. Desde temprana edad es fundamental practicar ejercicios que intervengan en el desarrollo integral del niño mes a mes hasta los 7 años.
¿Sabías que desde el primer mes tu bebé comienza a formar conexiones neuronales?
Esto significa que su cerebro está en la capacidad de recibir información y de comenzar a adquirir nuevos aprendizajes.
Tips para que tu bebé disfrute de la estimulación temprana
Crear un hábito, realiza ejercicios a una misma hora del día.
Asegúrate de comenzar la rutina luego de que el bebé coma y duerma así estará tranquila.
Las primeras 3 semanas comienza con 5 minutos de ejercicios, luego aumentarás el tiempo poco a poco.
Beneficios de la estimulación temprana
- Estimula la curiosidad
Hazle notar las características de un objeto emitiendo sonidos de sorpresa o de interés. Inmediatamente captarás su atención. Los móviles para cunas son juguetes que estimulan la curiosidad. Esto se debe a que los bebés siguen los colores, los sonidos y las luces de un objeto en movimiento.
- Aumenta el nivel psicomotor
Como la conciencia del cuerpo cuando está sentado o parado, también aprenden a tener equilibrio. Los juegos didácticos ayudan a los niños a mejorar la memoria y la habilidad mental.
Es recomendable que realices ejercicios repetitivos con tu bebé, así activas sus funciones cerebrales tanto físicas como intelectuales.
- Favorece el proceso afectivo
Ser empático y afectivo significa que se tiene una estabilidad emocional. La afectividad en los niños se crea cuando se forman vínculos que los llenan de autoestima y seguridad.
El desarrollo afectivo es fundamental para un desarrollo integral; para lograrlo debes tener un espacio adecuado para enseñarle a tu hijo a trabajar en equipo y a cooperar con los demás.
- La estimulación temprana te ayuda a identificar si hay algún problema motriz o de aprendizaje
Cuando existe un déficit o un trastorno, es posible que el niño no cumpla o no responda debidamente a ciertas estimulaciones. Esto se debe a que la estimulación temprana habilita las capacidades físicas y cognitivas del niño. Es por ello que, al comenzar a realizar este proceso a temprana edad, se puede detectar si el niño tiene una deficiencia que debe ser tratada.
5 ejercicios de estimulación temprana
Masajes de manos y pies
Este ejercicio lo puedes realizar en tu bebé desde el primer día de nacido. El tacto los ayuda a relajarse y crea lazos afectivos con los padres. Es importante que las manos y pies del bebé comiencen a recibir estímulos que los preparen para una pronta exploración del entorno, una gran idea es el reconocimiento de texturas en elementos o prendas de vestir creadas para la estimulación.
La mejor forma de hacerlo es en la cama, coloca a tu bebé acostado boca arriba mirando hacia ti y comienza los masajes. Háblale y toma cada dedo de sus manos y pies, de esta forma lo ayudas a ganar movilidad y a disfrutar de nuevas sensaciones.
Movimientos para el equilibrio
Las actividades físicas que desarrollan la motricidad gruesa se pueden comenzar a hacer luego del segundo trimestre.
Coloca las manos debajo de los brazos del niño, separa sus pies de la superficie y comienza a moverlo de adelante hacia atrás y de un lado al otro. La idea de este ejercicio es que el bebé busque el movimiento que lo vuelva a colocar en la posición original.
Estimulación con sonidos
Puedes comprarle un juguete que tenga luces y sonidos, pero no hay nada más favorecedor que la interacción con los padres.
Emite sonidos en diferentes tonos, estimúlalo a través de monosílabos como “pa” y “ma”. No modifiques los sonidos, repite los mismos todos los días, y solo cámbialos cuando tu bebé esté familiarizado con ellos.
Juegos didácticos
Como los bloques o cubos armables, ofrécele esta opción a partir de los 6 meses. Muéstrale la manera correcta de encajar formas, ayúdalo a colocar las piezas y luego deja que lo haga solo.
Juegos de imitación
Los bebés aprenden por la vista, por ello debes aprovechar esta ventaja para enseñarle las emociones.
Coloca al niño sentado de frente a ti y comienza a hacer muecas explicando qué significan. También puedes sacar la lengua o arrugar la cara para que tu bebé se anime a imitarte mientras se divierte.