Alimentación complementaria, ¿cómo manejarla?

La Alimentación Complementaria (AC) de Paolo inició un poco antes de lo estimado. Lo ideal, es empezarla a los 6 meses y dedicarle esos mismos a la lactancia materna, pero, pasa algo… Cuando tu bebé es alimentado únicamente con la leche que tú produces, la alimentación arranca a los seis meses. Por otro lado, cuando los bebés son alimentados con leche de fórmula comienzan a los cuatro meses, supongo que se debe a que la leche de “pote” no tiene la misma cantidad de vitaminas, minerales y nutrientes que la leche de mamá sí. Todo esto, dependiendo del pediatra al que vaya tu bebé, no todos están de acuerdo con este mecanismo, algunos inclusive inician desde más pequeños, mi bebé fue desde los cinco meses, ¿por qué? Sufrí una crisis terrible a los cuatro meses de Paolo y no pude seguir alimentando, fue un golpe durísimo para mí, aún lo recuerdo y me da rabia, pero bueno, me reconforta saber que mi mamá alimentó a mi hermano hasta los tres meses y es el único que no se enferma en esta casa, si acaso una vez al año (pero cuando lo hace es una cosa insoportable).
 

Ahora bien, por qué inició a los cinco. El pediatra lo decidió porque ya llevaba un mes dándole leche de pote, así que me dijo que comenzará con jugos y me dio una pequeña lista de frutas, pero, no me gustan los jugos ya que una vez que la fruta es licuada se convierte en pura azúcar. Hablando con otro pediatra al que va mi hijo (va a dos, uno particular y al de la EPS) me recomendó precisamente eso, que no le diera jugo, sino que agarrara la fruta y la aplastara, la hiciera una especie de puré para que él la pasara con mayor facilidad. Sin embargo, a Paolo le compré un chupo que tiene una malla y ahí le coloqué la fruta, iniciamos con la PAPAYA.
 
En realidad, no fue una lucha como pensé que sería, fue algo sencillo, terminó siendo “buena muela” como dicen en mi familia (quiere decir que come bien y de todo). Luego de ese bello producto, decidí agarrar las manzanas y aplastarlas, pero… encontré en una tienda una cosa espectacular que es como un molino y sentí que fue una de las mejores compras que he hecho en mi vida, ahora todo se lo paso por ahí. Aunque, también le doy los pedazos de comida para que él los pruebe por su cuenta. Le hago las cositas como papillas y se las doy así para que se alimente, pero en el plato van también pedazos, así lo estimulo.
 
Siendo honesta con todos ustedes, tuve mucho miedo al inicio. Me daba pavor que se ahogara con un trozo de comida y yo no supiera qué hacer o cómo reaccionar. Afortunadamente, hasta el día de hoy no le ha pasado nada, espero que todo siga así, de vez cuando hace unas caras extrañas, pero son muy risibles.
 
Paolo ama comer, le encanta, sonríe y se emociona cuando ve que corro la silla de comer para acercarla a la mesa del comedor (solo come cerca a la mesa del comedor, así él irá asociando que es el único sitio de la casa donde se debe comer). Cuando llego con el plato y su termito con agua se vuelve loco, va abriendo la boca sin que le haya brindado. Realmente anhelo que la cosa siga de este modo, y no me toque sufrir más adelante.
 
Quiero implementarle más métodos de comida, hasta el momento llevamos la forma tradicional que es con papillas, y más o menos con el BLW que son los pedacitos de trozo en el plato para que él vaya probando. Sólo tengo claro que él debe disfrutar su momento de comer, debo hacerlo agradable para que no se vuelva una tragedia, sino para que lo haga desear.
 
Tiene sus horarios de alimentación, son muy sencillos:

• Desayuno: 7:15 a.m. – 7:30 a.m. (es apenas despierte, generalmente lo hace a esta hora)
• Almuerzo: 12:00 p.m. – 12:30 p.m. (no antes, no después)
• Merienda: 4:00 p.m. – 4:30 p.m.

Aún no come durante la noche, sin embargo, la otra semana pienso iniciar con esto, mi mamá dice que el horario ideal es a las 6:00 p.m., así que de esta manera será.
 
Les deseo mucha suerte al momento de iniciar la AC de sus hijos, y si ya la iniciaron, acepto todos los consejos que deseen darme.