Frases como: “No le des chupo, no es bueno”, “¿cómo así no la amamantas?”, “no le saques los gases así”, son algunas de las frases que familiares, amigos y hasta las asistentes domésticas nos dicen cuando tenemos un bebé. Todos quieren opinar y tener la razón acerca de cómo debes criar a tu bebé, a todas nos ha pasado.
Independientemente de si los consejos son correctos o no, el simple entretenimiento es molesto para una mamá y, sobretodo una mamá que no ha podido descansar, que tiene noches en vela, que en el día tampoco logra descansar mucho tiempo y que está sensible debido a todos sus cambios físicos.
¿Qué hacer en estos casos? Antes que nada, no tomes a pecho todo lo que te dicen, no hay forma más rápida de minar tu confianza que haciendo caso a todos los consejos que te den, muchas veces contradictorios o inclusive extraños, haz lo que consideres mejor.
Ten en cuenta que la mayoría de consejos son bien intencionados, a la gente le atraen los bebés y quieren hacer comentarios “útiles”, a veces solo para tener algo que decir, a los cuales es bueno que respondas “gracias lo pensaré” , una buena respuesta para los abuelos quienes son los que más seguido nos están intentando inculcar su manera de criar: “ Mami gracias, voy a ver que dice el pediatra”
Todos tenemos nuestra manera de criar y no solo pasa con los bebés de la casa, con los más grandes también, tanto familiares como amigos, quieren estar opinando o interferir en momentos en que los estamos corrigiendo o regañando.
En lo personal me ha pasado varias veces y en algunas ocasiones por el hecho de estar bastante cansada y atareada exploto ante un comentario de estos: “¡Ay ya mamá!”, y la verdad lo único que hacemos es lastimar a esos seres queridos que tanto nos ayudan y que quieren lo mejor para nosotros. pero claro está, no siempre tienen la razón y el instinto materno es el que todas tenemos y el cual nos guia en el momento de criar a nuestros hijos.
Esto también nos sirve en el momento en que seamos esa amiga o familiar que quiere opinar acerca de la crianza de los hijos ajenos, lo pensaremos dos veces antes de querer opinar o sabremos decirlo en el momento indicado de la manera indicada.