¿Quién quiere entender a sus hijos y saberlos descifrar? yo creo que todas las mamás queremos eso, porque así podríamos ayudar a prevenir muchas situaciones evitando muchas incomprensiones y facilitando un poco este camino de la crianza y la maternidad.
Además, las que tenemos varios hijos sabemos que cada uno tiene una personalidad y gusto; así que, en algunos casos debemos actuar de manera diferente para que cada uno de nuestros hijos nos pueda entender.
Es importante entender estos aspectos:
La personalidad: es la característica más única de cada ser y está compuesta de un gran número de factores; hábitos, intereses, necesidades, costumbres, instintos, sentimientos, aptitudes, etc. Es el sello único de cada individuo. Esta se compone de dos aspectos fundamentales que son:
- Temperamento: esto es lo hereditario, genético, lo innato de cada ser y va configurando esa personalidad. Por ejemplo, esto se va mostrando desde muy temprana edad, cuando decimos que un recién nacido es tranquilo, inquieto o muy sociable.
- Carácter: este es adquirido y formado, porque se nutre de experiencias, aprendizajes y educación, por ser dinámico es más fácil de moldear, pero a su vez cualquier vivencia positiva o negativa produce un gran impacto en el ser para el desarrollo de la personalidad.
Así de simple como un juego matemático “temperamento + carácter = personalidad”
Entendiendo mejor estos conceptos podemos ir más allá en el comportamiento de nuestros hijos, para entender que no todo siempre es como lo queremos o como nosotros decimos, sino que cada niño tiene su tiempo y desarrollo.
Cuando como madres sepamos quienes son realmente nuestros hijos como personas, el siguiente paso es aceptarlos y valorarlos siempre con el ingrediente más importante, el amor.
¡Sigamos juntas aprendiendo este hermoso camino de la maternidad!