Si hay algo genial en ser niño, es la curiosidad. Pero a veces, para tíos, papás y profesores una pregunta los puede sorprender.
¿Cómo reaccionar? Ante todo conservar la calma, no asumir la respuesta con evasivas o reírse. A veces, la risa es producto de los nervios, pero para el niño puede significar una burla.
Las preguntas más comunes
¿De dónde vienen los bebés? Es una pregunta muy común entre los niños de hasta 6 años, más aún si van a tener un hermanito o hermanita. Clave explicarles que el bebé crece en la panza de mamá, que ella durante 9 meses le da todos los cuidados, nada de cigüeñas o mamá y papá lo trajeron de la tienda.
¿Qué es la muerte? De este tema hay que hablar con los niños y niñas en términos que entiendan según su edad, explicarles que es algo natural y si se profesa una fe en particular se pueden dar respuestas desde ahí pero sin fanatismos.
¿Por qué me enfermo? Es bueno hablar sobre esto cuando empiecen a ir al kinder, pues la gripe será algo habitual. Además de explicarles que es lo que les pasa se les pueden reforzar hábitos positivos como el lavado de dientes y manos, las visitas anuales al doctor y la buena alimentación.
Más allá de la pregunta, lo que hace la diferencia es la forma como nos comunicamos con los niños, desde el respeto, hablando con palabras que ellos entiendan y mucha naturalidad.
Cada pregunta, es un desafío para aprender juntos.