Hola, me recuerdas… Soy Natali Gallego, médico y pediatra, especialista en neurodesarrollo y aprendizaje infantil. Mamá enamorada de mis hijos, mi profesión y la vida.
Yo sé que estabas esperando con ansias este nuevo artículo, tanto como yo, porque hace poco les hablaba sobre ¿Qué debes saber sobre la atención de tus hijos?
A grandes rasgos entendimos este concepto indispensable en el desarrollo de nuestros niños, hablamos de los niveles que existen y cómo podemos mejorar la concentración y aprendizaje de los más pequeños. Es ideal que lo leas para que tengas más contexto…
Sin embargo, hoy te quiero hablar sobre otros temas importantes, como: los tiempos atencionales de los niños según su edad, qué puede factores pueden alterarlos y cuáles son las señales para considerar un posible déficit de atención e hiperactividad en los niños.
Recordemos la atención, es el proceso en el que centramos nuestros recursos cerebrales para lograr un objetivo específico. Poniendo los 7 sentidos a disposición de la actividad o el aprendizaje que estemos llevando a cabo.
Sabiendo esto, vamos a conocer, los tiempos atencionales que tienen los niños según la edad:
Un niño menor de 5 años, está entre 15 a 20 minutos máximo, seguidos, por eso no es idóneo que un niño de 4 o 5 años esté en una clase de 45 minutos sentado, porque su nivel orgánico y neurobiológico no se lo permite.
Ahora, un niño de 8 años, esta puede aumentar a 30 minutos, lo que le permite tomar lecciones un poco más largas, lo importante es no excedernos.
Y para un niño entre los 9 a 10 años, se estiman hasta 45 minutos de concentración seguidos en una actividad. Por lo que a esta edad ya se pueden implementar cursos con mayores duraciones, que tengan más exigencia atencional.
¿Por qué se pueden alterar estos tiempos?
Iniciemos por los distractores; cuando nuestro hijo está en su mesa de estudio, debe tener únicamente un cuaderno y un lápiz, nada de tener un lego, 20 colores diferentes, un mapamundi, y mucho menos, pantallas.
Y OJO puede que te asombres al leer que no debe tener colores, pero lo que sucede, es que estos, desvían la atención, por ejemplo, solo con pensar de qué color hacen una u otra letra, pueden distraerse fácilmente.
Por eso, lo ideal es implementar espacios con buena luz, libre de distracciones, como música y televisión, ya que, el cerebro se concentrará en estos estímulos, lo que hará que pierdan el enfoque en las actividades.
Otro factor importante es la postura, tanto en adultos como en niños, ya que, nuestro cerebro va a estar pensando en lo incomodo que estamos, pensando únicamente en tomar otra posición.
Así que es importante considerar todos los factores, ambientales, de luz, temperatura, una silla ergonómica, ideal sin ruedas para los niños, y que cubra por lo menos dos terceras partes de la espalda. Para garantizar una buena comodidad en momentos de aprendizajes.
Seguimos con los elementos que pueden afectar los niveles atencionales de los niños:
Hemos hecho gran énfasis en las pantallas, porque según la academia americana de pediatría, lo ideal es que los niños no tengan pantallas interactivas como tablets, celulares y demás, hasta los 3 años de edad. Por eso es necesario postergar lo máximo posible su uso.
Ahora, los video juegos no están recomendados para niños menores de 6 años, porque podemos creer que nuestros hijos están atentos en su juego, pero lo que sucede es que está fascinados con los distractores, con los colores, compitiendo o pasando de un nivel a otro, sin embargo, su atención es mínima.
También la alimentación juega un papel indispensable, por eso debemos garantizar una dieta rica en proteínas, grasas saludables y carbohidratos, para optimizar la formación del cerebro de los más pequeños, recordemos que este órgano adquiere mayor información para nuestra vida en los primeros 5 años de edad. Por eso es tan importante garantizar comidas ricas en macronutrientes, libres de azúcar, ultra procesados y por el contrario incluir frutas, verduras, agua, infusiones, etc.
Teniendo esto en cuenta, podemos decir que hay niños con niveles de atencionales bajos por todo lo que hemos mencionado, ya sean hábitos inadecuados de estudio, de pantallas, de alimentación o porque no tienen las instrucciones o motivaciones correctas para realizar sus actividades. Sin embargo, no tienen como tal déficit de atención.
Entonces ¿Cuándo debo considerarlo?
- Cuando los niveles mencionados anteriormente son bajos y persisten por más de 6 meses.
- Si estos se presentan antes de los 12 años.
- También si su inatención afecta más de 2 contextos, ya que, todos tenemos inicialmente 3 contextos: familia, amigos y el hogar. Así que si notamos dificultades en varios escenarios, es una señal de alarma.
- Otra forma de identificarlo es con la genética, ya que, si yo tengo déficit de atención, mi hijo tiene un 72% de probabilidad de heredarlo.
Todo esto, en lugar de verlo como algo negativo, debemos verlo como una posibilidad de identificar con mayor facilidad estas señales. Porque recuerda que con las acciones que hagamos diariamente, es decir, la epigénetica, podemos modificar de alguna manera la genética.
También debemos considerar que, en el 50 o 60% de los niños, el déficit de atención puede venir acompañado de hiperactividad, sin embargo, esta segunda, se puede diagnosticar antes, desde los 3 años de edad y los trastornos atencionales, desde los 5 años.
Ahora ¿Cómo puedo orientar a mi hijo si presenta estas señales?
Con ingreso de pantallas muy tardíamente y con una intensidad muy baja; además de eliminar los azúcares, porque este afecta completamente los niveles atencionales de los niños.
Implementa juegos de mesa, estos son un gran aliado, porque nos ayuda a mejorar la atención, flexibilidad cognitiva, la capacidad de planear, incluso la posibilidad de perder, generando un impacto positivo neurológicamente en nuestros hijos.
Así que optemos por trabajos colaborativos en familia, con pinturas, plastilinas, juegos de roles y demás, que nos permitirá no solo mejorar su atención, sino compartir tiempo de calidad con nuestras personas favoritas.
Y lo más importante, acompáñalo con tu profesional de confianza, es importante que todos participemos y hagamos parte del desarrollo de los niveles atencionales de nuestros hijos. Ya que cada uno tenemos procesos muy diferentes y contar con un especialista nos ayudará a potencializar los resultados.
Espero que aproveches al máximo toda esta información y sigas construyendo los mejores procesos de aprendizaje y crecimiento de tus niños al lado de OFFCORSS.
Con amor,
Natali Gallego Arbeláez
Médica y pediatra, especialista en neurodesarrollo y aprendizaje infantil
Directora de Centro Infantil SurdoZ.
Instagram: @estimulacionsurdoz